El papel de un defraudador es aprovecharse de la buena fe de ahorradores, instituciones financieras nacionales e internacionales, públicas y privadas, y de quien se deje, pero el colmo es cuando la propia autoridad encargada de echarle el guante también sucumbe ante los engaños del tramposo.
Tal es el caso de Rodrigo Lebois Mateos, quien a través de su empresa UNIFIN logró que le fuera aprobado el convenio concursal con el que buscó arreglar la deteriorada situación financiera de su compañía.
Y todo ello de la mano del Juzgado Primero de Distrito en Materia de Concursos Mercantiles, a cargo de su jueza favorita, Olga Borja Cárdenas, quien aprobó el referido convenio sin observar las irregularidades que en ese proceso se presentaron.
Entre las irregularidades está el hecho de que Lebois Mateos presentó a The Bank of New York Mellon como acreedor, mostrando la firma de Víctor Alejandro Landa Thierry, supuesto representante de dicho banco. Sin embargo, esta persona no tenía acreditadas facultades para suscribir como acreedor el convenio concursal.
A ello súmele que el juzgado desestimó las objeciones de los verdaderos acreedores al convenio, dentro de las cuales estaba precisamente que la representación de The Bank of New York Mellon no estaba justificada y no podía considerársele dentro de los acreedores reconocidos que aprobaron el convenio concursal.
Además de estas artimañas, Lebois Mateos aumentó por sus pistolas el porcentaje de aprobación del convenio con acreedores de 51.39 a 57%, exhibiendo hojas de firma y consentimiento adicionales sin darle vista a los acreedores, cuando en realidad no habían alcanzado la mayoría necesaria en el plazo que marca la ley.
El engaño a la autoridad judicial orquestado por Rodrigo Lebois Mateos y su empresa UNIFIN llevó a la aprobación del convenio sin reunir los requisitos de ley, lo que abre la sospecha sobre si hay alguna autoridad detrás de este personaje y su empresa para que siga actuando impunemente.
Trump will be back
Quien no engañó a nadie fue Donald Trump cuando al perder las elecciones en 2020 aseguró que volvería cuatro después.
Contra viento y marea todo parece indicar que será el candidato republicano y el escenario que no lo favoreció en 2020 no parece que vuelva a repetirse, por lo que también podría volver a quedarse con la presidencia de Estados Unidos.
En 2016 todo mundo decía más o menos lo que hoy también están diciendo: que su propio Partido Republicano no lo iba a dejar ni ser candidato; pero fue el candidato y luego el presidente del país más poderoso del mundo.
Ocho años después todo indica que Trump volverá, pese a todos los escollos que ha encontrado en el camino.
Estilo mata carita
Para terminar, una bomba yucateca, pues resulta que Renán Barrera va como caballo de hacienda, ganando por dos cuerpos al neomorenista Rommel Pacheco. El resto de la caballada, como Ramírez Marín, ni asoman la cabeza: no figuran nadita en las encuestas.