Resulta bastante polémico hablar hoy de Sergio Checo Pérez, quien por ahora es el único piloto mexicano que tenemos en la categoría reina del automovilismo, la Fórmula 1 (F1).
Si miramos al retrovisor notaremos que ha cristalizado en el ya casi concluido 2024 su peor temporada desde que está en la escudería Red Bull.
Y si bien es cierto que ciertas modificaciones en la categoría hicieron de la última temporada la más competitiva de los últimos años, la realidad es que Pérez nunca pudo ser consistente en la pista a bordo de su RB20.
Pero, ¿qué tan cierto es que a Checo no le dan las herramientas para competir?
Primero, antes que nada, quisiera compartirle que para mí es un orgullo verlo en la F1. Cuando sus resultados son buenos, se exponen sin exagerar; y cuando son malos, simplemente hay que señalarlos como son, con un análisis justo.
Sin embargo, a muchos les molesta ver la realidad de las circunstancias y prefieren encontrar pretextos casi ridículos. Por ejemplo: “Checo no tiene un auto para competir” o “Red Bull conspira contra Checo”. Cuando me dicen eso me quedo con la boca abierta y de plano prefiero no debatir. ¡Es perder el tiempo!
Respondamos a la pregunta
Ya le decía que fue una temporada única, pues siete pilotos tuvieron múltiples victorias a lo largo de 24 carreras en 2024, propiciando que Max Verstappen asegurara solo nueve triunfos por los 19 que alcanzó en 2023.
Pero para analizar exclusivamente la situación de Checo voy a pedir a sus aficionados más íntimos que saquemos de la ecuación al propio Verstappen, porque él, con o sin un coche en condiciones, es mejor que todos. Lo demostró cabalmente.
Fuera Max de la actuación, hay condiciones periodísticas para confirmarle que Pérez siempre tuvo un automóvil con las condiciones mínimas e indispensables para competirle a los monoplazas de Ferrari, Mercedes e incluso McLaren. Esa era la obligación del mexicano, competir en medio de una temporada muy especial; pero desde mayo, que fue su último Top 5, cristalizó entre abandonos, percances y falta de concentración una campaña llena de errores.
En otras palabras, lo crea o no, el mexicano siempre tuvo coche para por lo menos mantenerse en el Top 8. ¡Esa es la realidad!
Aunque los sesgados aficionados proCheco (que no son todos) siguen hablando de telemetrías y buscando responsables de una temporada para el olvido, si bien Red Bull como equipo tuvo fallas sumamente evidentes en la temporada, esas fallas no eran exclusivas para el RB20 del mexicano. La diferencia es que uno supo maniobrar porque es un piloto de primera línea y el otro simplemente se quedó corto.
Checo Pérez extendió en el primer cuatrimestre de 2024 su contrato con Red Bull hasta 2026, pero luego de lo ocurrido en la temporada es muy probable que se activen cláusulas y en una de esas termina por abandonar al equipo austriaco antes de que arranque la temporada 2025.
Es un hecho que Red Bull ya no solo espera de Checo y todo su equipo de trabajo resultados en términos económicos, sino también resultados positivos en términos deportivos o de competencia.