LA BONITA Y DIFÍCIL SITUACIÓN DE CHECO

“Sergio Pérez atraviesa por un momento complicado”.

Cristopher Rivera
Columnas
CHECO PÉREZ

Pensé por un instante en la temporada 2024 de la Fórmula Uno que nuestro piloto Sergio Pérez había aprendido de los errores del pasado para llegar de tal modo a ese punto de regularidad que tanto se le demanda en el equipo Red Bull, pero me precipité: no fue ni ha sido así.

En los últimos siete grandes premios de la F1 Checo se ha subido al podio en dos ocasiones, en Japón y en China.

Y sin el afán de justificar a Sergio, es una realidad que los movimientos de ingeniería y mecánicos al interior de su equipo han perjudicado de manera importante, sobre todo cuando se trata de ejecutar la puesta a punto (operación efectiva del mecanismo de un coche) de cara a un Gran Premio.

Hoy existe una presión especial en Red Bull. El ambiente es hostil. Los que ahora maniobran en las entrañas de los monoplazas no dan el ancho. Y eso, inevitablemente, propicia que la realidad alcance a algunos; por ejemplo, a Sergio Pérez. ¡Ahí están los números!

Creo que si bien se han acortado las distancias de competencia en el campeonato de pilotos en esta temporada, mucho por la crisis por la que atraviesa la escudería austriaca, Checo sigue teniendo coche para mantenerse en el top tres de manera constante. Hoy es quinto del campeonato de pilotos y con sensaciones de que pudo haber hecho más en las últimas carreras, donde tristemente se equivocó de manera increíble y hasta cierto punto inexplicable.

Veo a un Sergio Pérez que claramente atraviesa por un momento complicado. A mí, no me gusta meterme en temas personales de los deportistas de alto rendimiento, pero algo está pasando en la cabeza del piloto mexicano que no lo deja expresar su mejor versión en la pista y con ello tratar de competir como de pronto lo ha llegado a hacer.

La parte bonita

Lo más curioso de todo es que, en medio de la crisis de resultados, Pérez logró renovar con Red Bull hasta 2026. Y uno diría, o me diría: “Cristopher, si Checo no estuviera a la altura no lo hubieran renovado”.

¡Uy! Este tema de la renovación del contrato de Sergio Pérez con su equipo actual puede confundir a muchos.

Para mí, esta nueva extensión no necesariamente obedece a que ha sido un piloto descomunal, no. Obedece más bien a que detrás de Checo hay un respaldo empresarial y de negocios extremadamente robusto, que hoy propicia que la economía de Red Bull goce de cabal salud.

Red Bull necesita pagar un contrato millonario a Max Verstappen y a Sergio, junto con la gente que está a su alrededor, porque son pieza clave.

Después, el aspecto deportivo está como segundo pilar de dicha renovación.

Como sea, y haya sido como haya sido, nos da gusto saber que habrá Sergio Pérez para rato en la F1. Esperemos que aproveche al máximo esta oportunidad porque, insisto, esas versiones de que siempre le han dado un coche inferior al de su coequipero es una gran mentira que muchos creen; y eso lejos de beneficiarlo ha propiciado todo lo contrario.

¡Vamos, Checo!