La naturaleza benigna provee de manera que en cualquier parte halles algo que aprender.
Leonardo da Vinci
¿Sabías que estar en la naturaleza puede influenciar de manera significativa lo que comes?
De acuerdo con un nuevo estudio publicado en la revista Communications Psychology los investigadores llegaron a la conclusión de que pasar tiempo en la naturaleza o meramente ver escenarios verdes puede ayudar a que tomemos decisiones más sanas a la hora de comer, comparado con estar dentro de escenarios urbanos.
A través de cinco experimentos los expertos decidieron probar la hipótesis de que estar expuestos a la naturaleza hace que elijamos cosas sanas para comer, así que pusieron manos a la obra e hicieron diversas pruebas para comprobarlo.
El primer estudio se llevó a cabo en París, donde casi 40 personas eligieron dar un paseo de 20 minutos por un gran parque público (naturaleza) o por las calles de la ciudad (urbanismo). Los participantes no podían comer durante las dos horas previas al experimento y fueron guiados por mapas para completar sus rutas. Tras el paseo se les invitó a comer opciones saludables (frutas y frutos secos) y no saludables (galletas y papas fritas). Los participantes que pasearon por un parque eligieron más comida saludable en comparación con los que pasearon por las calles de la ciudad.
En el segundo estudio participaron casi 700 estadunidenses. Los participantes fueron asignados aleatoriamente a imaginar que pasaban una noche en una habitación de hotel con una de estas tres vistas: una escena de la naturaleza, una escena urbana o una cortina cerrada. Después eligieron una comida de un menú del servicio al cuarto, que incluía platos principales, guarniciones y bebidas clasificadas como saludables o no saludables.
En el tercer estudio, 885 participantes fueron expuestos de nuevo a escenas de naturaleza o urbanas. Esta vez se manipuló el orden de las tareas: los participantes valoraron lo sano o no sano de las opciones de comida antes o después de elegirlas. De este modo, los investigadores pudieron comprobar si las valoraciones influían de forma diferente en la elección de alimentos en entornos naturales o urbanos.
Propensión
En el cuarto estudio, los casi mil 200 participantes tenían que ver una escena natural o urbana y podían elegir ganar una comida natural saludable, una comida ligera dietética o un postre. Se les informó que solo podían obtener la comida de su elección si esta en verdad reflejaba mejor su preferencia real.
Y el quinto estudio pretendía replicar los resultados utilizando estímulos de un estudio anterior que no había dado resultados concluyentes. Con más de 900 participantes, este confirmó que la exposición a la naturaleza llevaba a los participantes a elegir comida más saludable.
A lo largo de los cinco experimentos los participantes expuestos a la naturaleza (ya fuera mediante paseos físicos por parques o viendo imágenes de escenas naturales) eran más propensos a seleccionar opciones más saludables en comparación con los expuestos a entornos urbanos o a condiciones de control.
“Al demostrar que la experiencia con la naturaleza favorece la elección de alimentos más sanos, nuestros hallazgos revelan un importante beneficio que los ecosistemas naturales aportan a las sociedades humanas y ayudan a explicar por qué la proximidad a la naturaleza se asocia con la buena salud y el bienestar”, comentaron los investigadores.
Y tú, ¿crees que preferirías comer cosas más sanas si estás en contacto con la naturaleza?