EL FASCISMO CORPORATIVO

“La Reserva Federal no era ni federal ni una reserva”.

Guillermo Fárber
Columnas
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“Benito Mussolini: ‘El fascismo debería llamarse más apropiadamente corporativismo, ya que es la fusión de los poderes corporativo y gubernamental’.

“Así es. Muchos, quizá la mayoría hoy en día, no comprenden el sistema bajo el cual se gobiernan. La mayoría de las personas que votan por los republicanos se enorgullecen de creer que Estados Unidos es un Estado capitalista. Los demócratas también consideran al país como un Estado capitalista y opinan que eso es lo que está mal en EU hoy. Cada vez más buscan un movimiento en la dirección socialista (o colectivista) para salvarlos de los supuestos males del capitalismo.

“Curiosamente, los males a los que se refieren son las desigualdades socioeconómicas que existen y el hecho de que aquellos en los niveles más bajos de la sociedad tienen menos oportunidades de mejorar su suerte en la vida. Y, por supuesto, como creen que viven bajo un sistema capitalista, asumen que el capitalismo debe ser el problema. Pero este no es el caso. Se puede decir que la primera gran introducción del colectivismo corporativista ocurrió en 1913 con la Ley de Ingresos y la Ley de la Reserva Federal.

“Estos se promulgaron bajo la presidencia de Woodrow Wilson y se vendieron al público estadunidense como anticorporativistas. La Ley de Ingresos, que introdujo el Impuesto Sobre la Renta, se promocionó como la creación de un impuesto principalmente para los ricos, que igualaría las disparidades de ingresos. Se afirmó que la Reserva Federal era una agencia del gobierno que dominaría los intereses bancarios codiciosos en Wall Street”.

Premisa

“Sin embargo, los pocos que realmente leyeron el proyecto de ley se enteraron de que la Reserva Federal no era ni federal ni una reserva: iba a ser propiedad de los bancos más grandes y les daría el poder de controlar la moneda de EU. Al prometer cambios contra el colectivismo se avanzaron los objetivos del corporativismo.

“Y así es hoy. Prácticamente todos los males de la sociedad estadunidense, tal como los describen los liberales, han sido causados por la introducción de conceptos colectivistas, capitalizados por la plutocracia estadunidense.

“Estados Unidos no es un Estado capitalista. El sistema económico es corporativista y el sistema social es colectivista. Sin embargo, es cierto que existen los restos de un mercado libre o capitalismo. Para la mayoría, ya sean liberales o conservadores, esto parecería imposible. Nos han enseñado a considerar a Wall Street como un sistema de capitalistas codiciosos. Seguramente nunca apoyarían el colectivismo, el salvador de las masas.

“Bueno, sí y no. Wall Street ha dominado la economía estadunidense durante más de 100 años. Y en todo ese tiempo ha buscado un mayor nivel de colectivismo. Entiende que el colectivismo (bajo cualquiera de sus formas de socialismo, fascismo o comunismo) es un medio muy eficaz para gobernar a los demás. El colectivismo no levanta a las masas, como sugería Karl Marx. En cambio, nivela las clases al rebajar a la gran mayoría de las personas a un nivel igual de pobreza.

La premisa es simple: prometer generosidad del gobierno, con la estipulación de que se debe renunciar a las libertades básicas para recibir la generosidad. Luego, una vez que todos han sido subyugados bajo el colectivismo, la generosidad disminuye constantemente. Los líderes corporativos convencen a la gente para que renuncie a sus derechos, pero luego no cumplen con su parte del trato: otorgar riqueza a la población ahora subyugada ( https://mail.google.com/mail/u/0/#inbox/FMfcgzGpFgwXHrXGnkjRLLrcpLVqzGzq )”.