Adrián López Velarde y Marte Cázarez son dos emprendedores mexicanos que forman parte del movimiento mundial para combatir la crisis climática. Originarios de Guadalajara, Jalisco, los jóvenes se conocieron en Taiwán, donde ambos trabajaban y estudiaban. Ahí comenzaron a planear los bocetos para crear una piel vegana a base de nopal, con el propósito de crear prendas, objetos y vestiduras amigables con el medio ambiente.
“El nopal o cactus, además de ser sumamente abundante en México, es una planta muy eficiente y resistente: gracias a sus propiedades naturales higroscópicas absorbe el agua que necesita por medio de la humedad presente en el ambiente, lo que le permite crecer sin necesidad de utilizar sistemas de riego, herbicidas o pesticidas”, explica en entrevista con Vértigo Adrián López Velarde, creador y fundador del proyecto.
Agrega que esta planta, además de contribuir a la reducción de consumos químicos, energéticos y de agua, contiene una proteína con características peculiares naturales que fungen como un impermeable y adhesivo resistente natural. “Esto es de suma importancia para la industria textil ya que así se evitan utilizar solventes nocivos para el medio ambiente y la salud”.
El producto fue desarrollado dos años después de investigaciones a prueba y error, hasta que dieron con la fórmula que respetaba todos los parámetros necesarios.
“Decidimos enfocar nuestros esfuerzos de investigación y desarrollo en buscar la manera de crear un material, al cual llamamos Desserto-Cactus Vegan Leather, que pudiera ser una alternativa amigable con el medio ambiente en las diversas industrias (como la moda, mueblería, automotriz e incluso aeronáutica) que utilizan el cuero animal y pieles sintéticas”, señala Velarde.
Consecuentemente, agrega, Desserto es altamente biodegradable y reciclable, por lo que se evita la acumulación de desperdicios en los vertederos al final del ciclo de vida útil de los productos. Asimismo “se fomenta de manera directa la economía rural en las zonas agrícolas con las que trabajamos ya que se le da un valor agregado al nopal y además, dada la facilidad de cultivar esta planta y los pocos cuidados que necesita, es sumamente económico producirlo como materia prima”.
Proceso
Los creadores de esta innovación tienen la convicción de que “la industria de la moda caminará hacia una producción vegetal que deje de lado el sufrimiento animal y contamine lo menos posible” ya que, desde su punto de vista, “el mismo crecimiento de esta industria se verá amenazado si en un futuro cercano no logra integrar materiales sustentables en sus cadenas de producción”.
¿Cómo es el proceso para crear el material? López Velarde explica que, por ejemplo, para obtener un metro de piel vegana se utilizan de dos a tres pencas de nopal de 1.5 kilos cada una.
“En Zacatecas está el rancho donde cultivamos nuestra materia prima. Ahí seleccionamos y cortamos solo las pencas maduras, sin dañar a la planta, por lo que cada seis u ocho meses obtenemos una nueva cosecha. Además no utilizamos un sistema de riego porque el nopal crece con agua de lluvia y los minerales de la tierra son ricos en Zacatecas y excelentes para la variedad de nopal que plantamos”, comenta.
La planta seleccionada, agrega, es muy resistente y puede soportar bajas temperaturas durante el invierno sin morir; sus espinas son muy pequeñas, por lo que es más fácil y seguro para la cosecha del equipo de agricultura.
“Después de cortar las pencas maduras las secamos al sol durante tres días, hasta lograr los niveles exactos de humedad que buscamos. Por lo tanto, no hay uso adicional de energía en este proceso de secado. Luego procesamos la materia prima orgánica para que forme parte de nuestra fórmula patentada, que nos permite hacer la piel vegana. Todo el material de nopal orgánico restante no utilizado en nuestro proceso se exporta y vende a nivel nacional en la industria alimentaria, por lo que puede imaginar cuán orgánico y seguro es nuestro material”, explica.
Triunfos
La piel vegana, que se lanzó formalmente en 2019, es libre de químicos tóxicos, ftalatos y PVC. Tiene una durabilidad mínima de diez años y permite ahorrar hasta 20% del agua que requiere la producción de cuero tradicional. Actualmente Desserto se distribuye en Canadá, Estados Unidos, México, Colombia, Brasil, gran parte de la Unión Europea, China, India, Vietnam y Tailandia.
“Tenemos desarrollos de proyectos con algunas de las marcas más prestigiosas del mundo de la moda y la industria automotriz. La respuesta de nuestros clientes en diversas partes del mundo ha sido muy positiva, lo que nos llena de motivación para seguir adelante”, expresa Adrián López Velarde.
Esta innovación también ha obtenido varios premios en el Viejo Continente. En octubre de 2019 se le reconoció en la feria Lineapelle 2019, celebrada en Milán, Italia. En marzo de este año Desserto se coronó en Munich, Alemania, como ganadora del VII Premio Internacional Green Product Award 2020, donde participaron mil 463 productos de 52 países. Ahora es reconocida en Mónaco, donde hace unos días se le entregó el Premio Internacional a la Sustentabilidad, en el marco de Monte-Carlo Fashion Week.
“Nos llena de emoción saber que en diferentes partes del mundo se desarrollan cada vez más materiales sustentables, puesto que es una necesidad ambiental de suma importancia. Sin embargo Desserto es un material único en su tipo ya que siendo altamente orgánico ofrece un desempeño, personalización, aspecto y suavidad al tacto similar al cuero animal. Se puede hacer como lo pida el cliente y se puede comparar con la piel animal y con la piel sintética; y ser tan resistente como ellas. Es transpirable pero en este caso no matamos animales y la huella ambiental es nula: es 100% orgánica”, puntualiza.
A pesar de que enfrenta la crisis sanitaria originada por el Covid-19 la compañía sigue hoy trazando proyectos y planes para llevarlos a cabo más adelante. “Muchas empresas, incluyendo la nuestra, se han visto en la necesidad de parar para evitar la propagación del virus, pero estamos seguros de que el futuro es prometedor trabajando de la mano con la naturaleza”, finaliza.