Texas es el principal foco, con un brote centrado en el oeste del estado que comenzó hace casi tres meses y ha alcanzado los 597 casos. Dos niños de edad escolar primaria que no estaban vacunados murieron por enfermedades relacionadas con el sarampión cerca del epicentro en Texas, y un adulto en Nuevo México que no estaba vacunado también murió de enfermedad relacionada con el sarampión.
Los otros estados con brotes activos —definidos como tres o más casos— son Indiana, Kansas, Michigan, Oklahoma, Ohio, Pensilvania y Nuevo México. Estados Unidos tiene en lo que va del año más del doble de casos de sarampión que en todo 2024.
El sarampión es causado por un virus altamente contagioso que se transmite por el aire y se propaga fácilmente cuando una persona infectada respira, estornuda o tose. Es prevenible mediante vacunación y se había considerado eliminado de Estados Unidos desde el año 2000.
Los expertos en salud temen que el virus se afiance en otras comunidades de Estados Unidos con bajas tasas de vacunación y que exista propagación durante un año.
En América del Norte, un brote en Ontario, Canadá, ha enfermado a 925 personas desde mediados de octubre hasta el 16 de abril. Esto se suma a los casos en México que la Organización Mundial de la Salud ha dicho están vinculados al brote de Texas. Un gran brote en el estado de Chihuahua tiene 433 casos hasta el 18 de abril, según datos de la Secretaría de Salud estatal.
Esto es lo que hay que saber sobre el sarampión en Estados Unidos:
Funcionarios de salud de Texas dijeron el viernes que hubo 36 nuevos casos de sarampión desde el martes, elevando el total a 597 en 25 condados, la mayoría de ellos en el oeste del estado. Cuatro texanos más fueron hospitalizados, para un total de 62 durante el brote, y los condados de Parmer y Potter registraron sus primeros casos.
Los funcionarios de salud estatales estimaron que alrededor del 4% de los casos —menos de 30 — son activamente infecciosos.