Los viajeros deben adoptar medidas preventivas, como aplicarse repelente de insectos, usar ropa protectora, elegir alojamientos con protección contra mosquitos y buscar atención médica rápidamente en caso de presentar síntomas.
El cambio climático favorece las condiciones ideales para la propagación de infecciones relacionadas con vectores (mosquitos), como dengue, zika, chikungunya y recientemente el virus oropouche. De hecho, el calentamiento global genera cambios en los hábitats de los mosquitos vectores, quienes se adaptan y se presentan en más regiones con condiciones climáticas adecuadas.
Aunque no se han reportado casos de fiebre de oropouche en México, la Secretaría de Salud (SSA) emitió una advertencia a los viajeros para que tomen medidas al visitar países de riesgo como Bolivia, Brasil, Colombia, Cuba o Perú.
Esta infección provoca síntomas de fiebre, dolor de cabeza, rigidez en articulaciones, dolores, molestias y, en algunos casos, fotofobia, diplopía (visión doble), náuseas y vómitos persistentes. Los síntomas pueden durar de cinco a siete días.
Información del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) explica que el agente etiológico de la fiebre de oropouche fue aislado por primera vez en 1955 en Vega de Oropouche (Trinidad y Tobago), a partir de la muestra de sangre de un trabajador forestal.
El virus se transmite al ser humano durante la alimentación hematófaga (picadura) de los insectos hembra Culicoides paraensis, conocidos popularmente como jejenes o chasquites, aunque también se ha notificado la transmisión por otros insectos.
Después de un periodo de incubación de cinco a siete días, los pacientes experimentan fiebre alta, dolor de cabeza, rigidez en las articulaciones, dolores y molestias. Generalmente, los pacientes mejoran en un lapso de una a tres semanas. Los casos graves con meningitis o encefalitis son escasos; sin embargo, este año Brasil reportó dos muertes por oropouche.
Del 1 de enero al 16 de julio de 2024 se han notificado siete mil 688 casos confirmados de oropouche en cinco países de América Latina: Bolivia (313 casos), Brasil (seis mil 976 casos), Colombia (38 casos), Cuba (74 casos) y Perú (287 casos). No obstante, el número de casos puede ser mayor, ya que los síntomas se confunden con otras enfermedades arbovirales como dengue, zika y chikungunya, que son endémicas en la región.
Por ejemplo, Brasil reportó que 30% de los casos probables de dengue durante este año fueron de fiebre de oropouche.
Si bien el riesgo es medio, los viajeros deben adoptar medidas preventivas, como aplicarse repelente de insectos, usar ropa protectora, elegir alojamientos con protección contra mosquitos y buscar atención médica rápidamente en caso de presentar síntomas.
Dengue
En México el dengue se ha convertido en una enfermedad bajo constante vigilancia epidemiológica. Datos de la SSA revelan que tan solo en un año los casos aumentaron 534%, pues al corte del 8 de julio último pasaron de cuatro mil 892 en 2023 a 22 mil 211 en el mismo mes de 2024.
En la actualidad cerca de la mitad de la población mundial corre riesgo de contraer dengue y cada año se producen entre 100 y 400 millones de infecciones.
La viróloga Susana López Charretón, del Instituto de Biotecnología de la UNAM, explica que “en México esta enfermedad ha estado presente desde hace 35 años en 30 de los 32 estados. Las regiones que se han librado son Tlaxcala y la Ciudad de México debido a su altura, porque los mosquitos no se reproducen. Pero los cuatro serotipos circulan en este momento y se sabe que en el sur del país transita el dengue durante todo el año debido a que es endémico”.
La investigadora menciona que el dengue grave comienza cuando desaparece la fiebre y se producen un dolor abdominal intenso, vómitos persistentes, respiración acelerada, hemorragias en las encías o la nariz, cansancio, agitación, heces con sangre, sed intensa, piel pálida, así como debilidad.
De acuerdo con la experta, después de una infección primaria de dengue el cuerpo desarrolla anticuerpos neutralizantes contra ese serotipo o variante. “Como tal no hay un tratamiento específico para el dengue, los tratamientos se centran en aliviar el dolor y se prescribe a menudo paracetamol, pero deben evitarse los antiinflamatorios no esteroideos, como el ibuprofeno y la aspirina, porque aumentan el riesgo de hemorragia. Y las personas con dengue grave necesitan ser hospitalizadas”, recomienda.
Zika
Las autoridades confirmaron en 2024 el primer caso en México de zika, enfermedad que causa un virus transmitido por el mosquito Aedes aegypti, peligroso principalmente para las mujeres embarazadas. La SSA, a través de la Dirección de Vigilancia Epidemiológica de Enfermedades Transmisibles, informó que Oaxaca es el estado donde se registró el primer caso de zika este año y con el que suman 541 casos en el periodo 2015-2024.
El zika es una enfermedad causada por un virus transmitido por la picadura del vector y también se puede adquirir por vía sexual, o transmitir de madre a hijo durante el embarazo y, en casos raros, a través de transfusiones sanguíneas. El mosquito Aedes aegypti, que se encuentra en África, Asia, América y el Pacífico, también transmite dengue y chikungunya.
El virus del zika puede causar microcefalia, generar malformaciones congénitas y complicaciones en el embarazo, como aborto espontáneo y parto prematuro si la madre contrae la infección, por eso no es recomendable viajar a lugares con circulación del virus del zika.
La microcefalia es un defecto congénito donde el tamaño de la cabeza del bebé puede ser más pequeño de lo esperado; además, influye en el tamaño del cerebro.
Para diagnosticar una infección por el virus del zika se realiza un análisis de sangre con el que se pueden determinar los anticuerpos contra el virus.
Chikungunya
Mediante la iniciativa “¡Mosquitos buenos! Uts K’oxol” que se liberaron 170 mil mosquitos macho en busca de que los especímenes liberados eviten que los vectores transmisores de las enfermedades virales se reproduzcan.
El gobierno de Yucatán, la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) y la Universidad Estatal de Míchigan pusieron en marcha la iniciativa en esta temporada de lluvia para prevenir la transmisión de dengue, zika y chikungunya, que incluye campañas de descacharrización frecuentes para evitar la propagación del mosquito Aedes aegypti.
En tanto, el coordinador de campo del proyecto, Azael Che Mendoza, explica que los mosquitos Aedes aegypti macho con wolbachia, una bacteria natural presente en 60% de los insectos y otros animales, se producen de manera controlada en el Laboratorio para el Control Biológico de Aedes aegypti de la UADY y su objetivo es copular con mosquitos hembra de campo, para que estas produzcan huevos infértiles, reduciendo significativamente con ello la población de mosquitos hembra transmisores de las enfermedades antes citadas.