Innovar o morir, retos del reciclaje en tiempos de Covid

Los recolectores, pieza fundamental de la cadena, son ahora los más vulnerables

Martha Mejía
Bienestar
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Foto: Walter Cicchetti

Por sí misma la industria del reciclaje, enfrenta grandes desafíos, ahora suma las dificultades presentadas por el Covid-19, afectando desde la recolección de residuos, la falta de materiales para la industria, el aumento del consumo de los plásticos de un solo uso; hasta los trabajos en riesgo donde los recolectores de basura son un actor principal en la cadena de reciclaje.

“En México como en diversos países latinoamericanos, todavía la recolección es ineficiente, muy manual, es decir, se utilizan muchas personas a lo largo de la cadena de valor para recuperar los materiales. En este ciclo, el recolector representa un papel fundamental en nuestra sociedad y para la economía circular. Debemos entenderlos como agentes de cuidado, tenemos que cambiar nuestra mentalidad y dignificarlos separando debidamente nuestros residuos, sobre todo avisarles si vamos a desechar cosas que están contaminados con Covid-19”, explica en entrevista Alfredo Román Benítez, gerente de sustentabilidad de Tetrapack México.

De acuerdo con datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), cerca de 4 millones de personas en América Latina viven de reciclar, recolectar y procesar residuos de plástico, vidrio, metal, cartón y papel. No obstante, aunque la región produjo un promedio de 231 millones de toneladas de residuos urbanos en 2018, en la región se recicla menos del 3% de la basura que se produce y de ese porcentaje, 80% de los residuos es gestionado por los recicladores, siendo Brasil, Colombia y México los países donde se concentran mayoritariamente estas actividades.

Por ejemplo, hoy en día en México se recicla 30% de los envases de Tetrapak, unas 42 mil toneladas aproximadamente. El objetivo, según Alfredo Román Benítez, es lograr 40% en cinco años y estar a niveles de otros países como los europeos.

El Tetrapak, compuesto por aluminio, polietileno y cartón, se puede convertir en papel higiénico, cartón corrugado, encontrarse en zapatos, en láminas acaudaladas o planas para material de construcción o hasta en mobililiario urbano como los postes del sistema Ecobici.

Cuando se separan las capas del envase, el cartón es el componente principal de estos, 75% se va para la fabricación de papel, el otro 25% que es el polietileno y el aluminio se va para aplicaciones principalmente para la industria del plástico, para la industria de la construcción que son las láminas acanalada y planas, ese sector si se vio afectado, tuvieron que cerrar debido a que no es un sector prioritario. Con lo que se refiere al cartón hemos estado trabajado normal, ya que por ejemplo, la producción de papel higiénico está considerado como un sector prioritario y no paró”, explica.

Agrega que con lo que se refiere al polietileno y el aluminio, “se optó por almacenarlo hasta que nuevamente se estabilice y vuelvan a regresar los recolectores de de este material. En esta parte si nos afectó”.

Innovar o morir

Agrega que una de las metas para Tetrapack es lograr que el polietileno y el aluminio se puedan sustituir por materiales que provengan de fuentes renovables. “Actualmente la única fuente renovable que tenemos como materia prima es el cartón, este proviene de bosques que son manejados de forma sustentable; el polietileno y el aluminio son recursos no renovables, uno proviene del petróleo y el otro de la minería, el siguiente paso es sustituir el polietileno por biopolímeros provenientes de fuentes de plantas, en este caso lo que estamos pensando es que provenga de la caña de azúcar”, explica.

Para el caso de México, agrega, el primer paso es que las tapas de nuestros envases sean de de bio polimero, la compañía se ha propuesto lograr todo esto en un periodo de 10 años, son desarrollos que llevan tiempo por cuestión se tienen que ver con asegurar que no se va a cambiar las propiedades de los alimentos que contiene el envase.

Economía circular

Si bien el reciclaje es solo una de las llamadas 5 Rs, necesitamos fomentar las otras cuatro: reutilizar, reducir, rediseñar y repensar qué hemos hecho, emprender acciones que nos lleven a un cambio de modelo hacia la economía circular, señala el gerente de sustentabilidad de Tetrapack México.

“La economía circular es sistema de producción, relativamente nuevo, se inició hace 15 años aproximadamente, busca que un material se pueda mantener el mayor tiempo posible dentro de un ciclo y aprovecharlo hasta su máxima capacidad, algunos materiales llegan a servir hasta en 16 ciclos diferentes. Se trata de una nueva forma de producir y de consumir, y al mismo tiempo dejar paulatinamente a la economía lineal, en la cual estamos inmersos actualmente”, finaliza.